Ineficiencia urbana

Un día cualquiera...

-Hola, llamo para que mañana vengan a buscar un paquete.
-Ah, sí, sí, dejame que tomo nota.

Al otro día.

(riing)

-Vengo a buscar una carta.
-Eh, un paquete.
-No, una carta.
-No te podés llevar un paquete?
-No, vengo a pie.
-WTF. Dejame que llamo.

(al teléfono)

-Hola, llamé para que vengan a buscar un paquete y vino un flaquito a buscar una insípida carta.
-Dejame fijarme. Sí, sí, una carta.
-Un-pa-que-te.
-No, pero acá dice una carta.
-Yo ayer llamé y dije PAQUETE.
-No sé lo que dijiste ayer, pero mi compañero anotó carta.
-¿Qué parte de paquete no entendés? ¿Necesitás que te lo deletree?
-No, pero es una carta que van a buscar.
-Vos te das cuenta que es tu palabra contra la mía con la pequeña diferencia que yo tenía el paquete acá al lado y NUNCA PUDE HABER DICHO CARTA?
-No sé, mi compañero puso carta.
- (comenzando a irritarme muy mal) Vos me estás diciendo mentirosa???
-Mi compañero anotó carta.
- (visiblemente alterada) PAQUETE! No podés venirlo a buscar hoy?
- No, mañana.
-Pero yo ya arreglé con el cliente.
-Bueno, pero mañana te lo pasamos a buscar.
-Y cómo sé que mañana no me vas a decir que te tenés que llevar un elefante? Y qué después me vas a decir: aayy noo, yo vine a buscar un elefante, no me puedo llevar el paquete!
- ...

(ahí intervino mi jefe, dijo que lo llevaba él)

-Sabés qué? Lo lleva mi jefe. El servicio apesta. Chau.

Y corté.